¿POR QUÉ ESTUDIAR LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN?
Es una cuestión que los profesores de medios deberían plantearse constantemente e ir dando respuesta de acuerdo con la evolución y el desarrollo de los medios. Nuestro razonamiento deberá ser apremiante y convincente, así como sencillo e inteligible. Los propios medios están en constante cambio, se extienden y se desarrollan. La educación, por tanto, tiene que ser flexible y estar abierta al cambio. Las posibles teorías sobre educación audiovisual serán tan diversas y de tanta amplitud como variados los intereses de quienes participan en ella. Todas estas orientaciones exigen que se amplíe y se desarrollen programas educativos que fomenten la autonomía crítica.
La educación audiovisual debe considerarse prioritaria, y por ello, se destacan siete razones para esta consideración:
1. El elevado índice de consumo de medios y la saturación de éstos en la sociedad contemporánea. Hacemos usos diferentes de los medios, y no los integramos únicamente con otras actividades sino unos con otros. En ocasiones participamos de tres medios diferentes de los modos primario, secundario y terciario.
2. La importancia ideológica de los medios y su influencia como empresas de concienciación. Los medios son importantes moldeadores de nuestras percepciones e ideas, son empresas de Concienciación que no sólo proporcionan información acerca del mundo sino maneras de verlo y entenderlo. El producto principal de los medios no es la audiencia, sino tipos concretos de concienciación de las audiencias. Los medios nos señalan lo que es importante y lo que es trivial mediante lo que hacen notar y lo que ignoran, mediante lo que amplían y lo que silencian u omiten. Quienes controlan y trabajan en los medios no sólo tienen poder para fijar prioridades, ofrecer explicaciones y construir sus propias versiones de los acontecimientos. Tienen la capacidad de proyectar estos acontecimientos como naturales y auténticos, sencillamente como una parte de la manera de ser de las cosas. Es necesario desarrollar y generalizar la comprensión crítica de los medios, no sólo en la escuela sino en todos los niveles de la sociedad. Esto representaría un paso claro hacia el tipo de iniciativa de educación permanente que propone la publicación de la UNESCO , Aprender a ser.
3. El aumento de la manipulación y fabricación de la información y su propagación por los medios. Las corporaciones multinacionales, los organismos y ministerios gubernamentales, los partidos políticos, las fuerzas armadas e incluso instituciones más bien pequeñas como las empresas locales y las universidades poseen en la actualidad sus propios departamentos permanentes de comunicaciones externas. En la mayoría de los casos no puede considerarse que los medios sean bastiones de la libre expresión. Necesitamos aprender mucho más sobre cómo utilizar eficazmente los medios para nuestros propios fines. La educación audiovisual representa tal vez una de las pocas esperanzas que la sociedad tiene de contrarrestar las duplicidades más flagrantes de la industria de la comunicación y las relaciones externas, de estimular para que se eleve el nivel del periodismo, de producir audiencias más informadas, discernidoras y escépticas, y de esclarecer las reglas de manipulación de los medios para que todos podamos tomar parte en el juego, si así lo deseamos, aunque naturalmente nunca será en las mismas condiciones. La educación audiovisual es uno de los pocos instrumentos que profesores y alumnos poseen para empezar a desafiar la gran desigualdad de conocimiento y poder que existe entre los que fabrican la información en su propio interés y quienes la consumen inocentemente como si se tratase de noticias o diversión.
4. La creciente penetración de los medios en los procesos democráticos fundamentales. En la actualidad, los medios han penetrado en la esencia misma del proceso democrático. Las elecciones generales, ahora, son esencialmente acontecimientos de los medios, y las giras, debates, discursos, visitas y demás actividades de este tipo se planifican teniendo muy presentes los tiempos y prioridades de los medios. La mayor parte de los jóvenes considera que la televisión es su fuente de información política más importante. En un mundo en que las imágenes adquieren mayor significación que las medidas políticas, en el que los slogans con frecuencia cuentan más que los razonamientos, y en el que todos tomamos decisiones políticas de gran importancia con la única base de lo que muestran los medios, la educación audiovisual resulta esencial, no sólo para el ejercicio de nuestros derechos democráticos, sino también para defendernos de los graves excesos de la manipulación en los medios con fines políticos. La educación audiovisual es también un paso esencial en la larga marcha hacia una verdadera democracia participativa y en la democratización de las instituciones. En este sentido amplio de “educación para la democracia” es donde la educación audiovisual puede jugar el papel más significativo.
5. La creciente importancia de la comunicación e información visuales en todas las áreas. La televisión es probablemente la fuente más importante de información política en nuestra sociedad, y la mayoría de la gente la considera la fuente de información más fiable. Lo impreso empieza a ser considerado un medio visual. La presentación, el diseño y la tipografía son parte significativa del proceso total de comunicación. Las escuelas, tendrán que reconocer lo importante que es desarrollar en sus alumnos la capacidad de examinar las imágenes visuales de manera crítica. El uso creciente de material videográfico, hará que la capacidad de evaluar los testimonios visuales llegue a ser una destreza transversal que deberá imponerse en la enseñanza y aprendizaje de todas las asignaturas.
6. La importancia de educar a los alumnos para que hagan frente a las exigencias del futuro. Tenemos que avanzar hacia lo básico, hacia el desarrollo de las aptitudes y habilidades que todo el mundo necesita si se les quiere educar para la vida de este siglo. Los propios medios, periodistas y profesionales de la radio y de la televisión, consideran su tarea como un servicio a los intereses del público y que, de la misma manera, que la audiencia los necesita, ellos necesitan una audiencia bien informada y con conocimiento crítico.
7. El vertiginoso incremento de las prestaciones nacionales e internacionales para privatizar la información. Se está produciendo una creciente privatización de la información y de los servicios de entretenimiento. La transformación de la información en un bien de consumo y el desarrollo de los sistemas de datos corporativos internacionales constituyen amenazas para el futuro de todos los sistemas de información pública y para el propio sistema educativo. Los valores de las instituciones educativas públicas se basan en que la información debe:
- estar a libre disposición de quienes la necesiten o puedan usarla
- ser de acceso abierto, para todos
- estar disponible en general, en calidad de servicio público
- ser distribuida en centros educativos en beneficio del público
Cuando la información se convierte en un artículo de consumo, inevitablemente el papel y la naturaleza de la misma información empiezan a cambiar. La producción de información socialmente útil queda entonces debilitada por la información produce beneficios.
Sólo un sistema educativo público completamente autónomo podrá lograr una expansión de la conciencia crítica para hacer frente a la expansión de la información y de la tecnología de la comunicación.
Los profesores de medios pueden desempeñar un papel primordial al moldear una conciencia pública capaz de articular el interés de la gente y capaz de reclamar el control popular de la información, especialmente en la esfera educativa. Pueden motivar a sus alumnos para que discutan, participen y emitan juicios críticos sobre estos temas. ¿Quién lo hará si no son ellos?
Len Masterman,
"La Enseñanza de los Medios de Comunicación"
Ed. de la Torre
2º capítulo "¿Por qué?
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